Hay carreras hacia la abyección tan predecibles que no deparan ninguna sorpresa cuando fatalmente se cumplen. Es el caso de la trayectoria de Robert Menard, fundador de Reporteros sin Fronteras (RSF), que ha logrado el triste honor de convertirse en alcalde de la ciudad francesa de Béziers con el apoyo del Front National, fuerza más votada allí en la últimas elecciones.
Su gestión en RSF fue tan sectaria y personalista que, pese a su retórica defensa de la libertad de expresión, en realidad sirvió para poner más a sus colegas directamente en el punto de mira de la represión al usarlos como parte en los conflictos (con iniciativas políticas que negaban la imprescindible neutralidad periodística), en vez de centrarse en la defensa de los perseguidos. Su uso de la ONG como si fuera un partido no sólo dañó la imagen de RSF sino que anunciaba una desmedida ambición política. Esta vergonzosa alcaldía ha venido a confirmarlo.
*Link a la noticia sobre la alianza de Menard con la extrema derecha: http://www.leparisien.fr/politique/beziers-robert-menard-s-entoure-de-personnalites-d-extreme-droite-19-04-2014-3780629.php